jueves, enero 24, 2013

El Estado burgués, a contramarcha de la revolución, continúa criminalizando la lucha popular Organizaciones de derechos humanos llevadas a juicio por apoyar a los Yukpas

 Niños Yukpas durante protesta de sus familias ante el TSJ en Caracas.

El próximo 7 de febrero se iniciará un juicio contra la Sociedad Homo Et Natura, defensora de los derechos humanos de los pueblos indígenas y contra el Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos, Provea, y por apoyar una protesta indígena Yukpa que se efectuó en el año 2010 frente a la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). El 21 de julio de 2010 familias indígenas del pueblo  Yukpa, integradas por madres, padres, niños, niñas y adolescentes, se apostó a la entrada del TSJ, luego de viajar desde la sierra de Perijá para protestar por la usurpación de sus tierras ancestrales, contra el sicariato y  contra el hostigamiento judicial-represivo a sus líderes. De esta manera ejercían su derecho constitucional a manifestarse pacíficamente. El pueblo Yukpa reclamaba el cumplimiento de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la cual dispone que las autoridades legítimas de los pueblos indígenas podrán aplicar en su hábitat instancias de justicia, con base en sus tradiciones ancestrales y exclusivamente para sus integrantes.

La organización Homo Et Natura, conocida por su apoyo a los indígenas desde hace muchos años, emitió comunicados solidarios y Provea, difundió por la Web la convocatoria del pueblo Yukpa a acompañar a esta comunidad indígena, con sus mujeres, ancianos, niños y jóvenes en la lucha por sus derechos. Decenas de organizaciones populares de Caracas y de otras partes del país se solidarizaron y se hicieron presentes ante el TSJ.  Uno de los reclamos principales de los Yukpas fue que el cacique Sabino Romero y otros dirigentes indígenas, acusados por la justicia ordinaria a raíz de enfrentamientos suscitados con ganaderos y terrófagos en sus territorios, fuesen juzgados por la justicia indígena, tal como lo establece el artículo 260 de la Constitución Nacional y no por la justicia ordinaria.

Como lo reseña La Guarura, expresión digital de colectivos militantes que apoyan luchas populares y que se han solidarizado con los Yukpas, a consecuencia de esta movilización, en fecha 27 de julio de 2010, fue introducida una  acción de protección por el abogado Ramón Liscano, actuando en su carácter de Fiscal Centésimo Sexto (106 º) del Ministerio Público, a favor del grupo de niños, niñas y adolescentes que formaban parte de la concentración a las afueras del TSJ.

El fiscal solicitó que los niños, niñas y adolescentes fueran devueltos al “ambiente propio de su cultura” y que se estableciera la responsabilidad de la Sociedad Homo Et Natura y Provea por el presunto traslado ilícito de los mismos a los fines de ser utilizados en una protesta en la cual no tenían un interés legítimo, llegando incluso a afirmar la utilización de los mismos como “escudos humanos” entorpeciendo así las actividades del TSJ. Ver: http://laguarura.net/2013/01/18/a-juicio-provea-y-sociedad-homo-et-natura-por-apoyar-protesta-indigena/

La nota de La Guarura, señala que tanto las acciones realizadas por Provea como por la Sociedad Homo et Natura fueron encaminadas a concretar y fortalecer acciones de exigibilidad de derechos del pueblo Yukpa, en el marco de sus usos y costumbres y que no reconocer estas particularidades en la movilización del pueblo Yukpa, se traduce, como consideran que en efecto sucedió,  en la criminalización de la protesta pacífica de los pueblos indígenas y de las organizaciones que apoyaron la causa.

Voceros vinculados a esta causa informan que también serán llevadas a juicio varias madres de niños Yukpas, por haberse trasladado con sus hijos y haber acampado a las puertas del TSJ junto a otros miembros de su comunidad en lucha. Consideran como una grosera expresión de la vieja justicia burguesa, “goda hasta la médula”, impregnada de “colonialismo criollo” y profundamente hipócrita, legada por la IV República con la que no se termina de romper definitivamente, que se utilice el subterfugio de la supuesta “protección de los niños, niñas y adolescentes” Yukpas, cuando en la sierra les han despojado de sus territorios, asesinan a sus padres y hermanos, atentan contra su modo de vida y su convivencia pacífica, encarcelan a sus luchadores y el poder económico capitalista, con la complicidad de sectores estatales acorralan a esos mismos niños y les impiden vivir con dignidad.

Desde el punto de vista de las organizaciones que acompañan a los Yukpas, el juicio es visto como una retaliación contra los que luchan y en este caso, interpretan que de nuevo  los residuos y rémoras del estado liberal blanco occidental, arremeten contra  la diversidad y contra la Constitución Bolivariana, al no reconocer el estado multiétnico y pluricultural, pues todo el problema es la presencia de las mujeres yukpa con sus pequeños hijos en el Tribunal Supremo (TSJ) pidiendo justicia para sus dirigentes, Sabino, Alexander y Olegario, que se encontraban presos fuera de sus comunidades, lo que llevó a familias integrantes de esta étnia a dormir en una carpa improvisada frente al TSJ durante dos semanas, con sus hijos, a quienes no podían dejar solos en la sierra, por cuanto se movilizaron como pueblo,  y actuaron de acuerdo con las costumbres  y cultura de nuestros pueblos originarios, cosa que estaría ignorando de manera inconcebible el tribunal.

La “hipocresía” de esta forma de concebir la “justicia” resulta tanto más escandalosa para los movimientos populares, cuando en esta revolución bolivariana, se acaba de dejar libres a banqueros corruptos, y se discute al interior del gobierno la solicitud de amnistía de los responsables de la masacre del del golpe del 11 de Abril, los comisarios de la ex Policía Metropolitana,  Forero, Vivas y Simonovis, por lo que los colectivos solidarios con los Yukpas advierten que no van a permitir que organizaciones que defienden derechos humanos y mujeres que andan con sus hijos clamando por justicia, sean llevados a juicio, mientras impera la impunidad para sicarios que han matado a los Yukpas, a centenares de luchadores campesinos y se libera a corruptos para complacer a la burguesía.


El hecho de que la organización de derechos humanos Provea haya sido vinculada con la oposición antichavista en otras de sus actuaciones, no deslegitima ni le quita razón a la causa indígena, ni invalida el apoyo a esta lucha justa, pues en este caso la posición de Provea se colocó en el lado correcto. El resto de las organizaciones que han venido apoyando a los Yukpas se identifican con el proceso revolucionario bolivariano y defienden lo que en materia de derechos indígenas fue conquistado a través de la nueva Constitución de 1999, después del primer triunfo electoral de Chávez y con el proceso constituyente.
 
Nuevamente, las organizaciones populares y revolucionarias que han venido brindando su apoyo a los Yukpas, convocan a acciones solidarias y llaman a rechazar el juicio contra las madres Yukpas, Provea y Homo et Natura. Anuncian protestas y exigen suspensión del juicio (Sala 8 del Tribunal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes) y las imputaciones criminalizadoras de la lucha popular e indígena, entendidas a su vez como lesivas a la libertad de expresión ejercida por organizaciones y luchadores sociales.


martes, enero 15, 2013

A las puertas de la mitología


Tomado de: http://www.noticias24.com/venezuela/noticia/94157/

Por: William Ospina

Alguna vez le pregunté a García Márquez si no había sido muy difícil ese momento en que buena parte de la intelectualidad latinoamericana rompió con la Revolución cubana, y sólo él y unos pocos siguieron siendo sus amigos.


Gabo no respondió con una teoría sino con algo más visceral: “Para mí, dijo, lo de Cuba fue siempre una cuestión caribe”. A mi parecer, ello quería decir que no se trataba de marxismo o teorías revolucionarias sino de la lucha de un pueblo por su soberanía y su cultura frente al asedio de unos poderes invasores.

Los gobiernos de Estados Unidos, que compraron la Florida y se robaron a México, que se apoderaron de Puerto Rico y separaron a Panamá, se habrían anexionado con gusto la hermosa isla de Cuba si ésta no hubiera sido siempre tan irreductible en su rebeldía y tan firme en su resistencia.

Ya en Martí estaba todo lo que haría de Cuba un país tan celoso de su independencia. García Márquez, que conoce las felonías del “buen vecino” porque desde niño supo de la masacre de las bananeras en la plaza de Ciénaga, comprendió que era vital mantener a raya el afán hegemonista de aquel país que respeta tanto la ley dentro de sus fronteras y la ignora tanto fuera de ellas.

La de América Latina ha sido la historia de esa saludable tensión ante los poderes del norte. Hace poco visité en el norte de México, en Ciudad Juárez, el Museo de la Revolución. Nada me impresionó tanto, más incluso que el cráneo de vaca sobre una mesa bajo la fogosa luz del desierto, que una fotografía donde la sociedad de El Paso, Texas, caballeros con sombrero de copa y damas floridas con trajes ensanchados por miriñaques, presenciaba desde la orilla del río Grande, como en picnic, la lucha al otro lado de la frontera, donde hombres de grandes sombreros y dobles pistolas se alzaban contra la dictadura. La viva imagen de una sociedad del bienestar que se entretiene con el espectáculo de tragedias ajenas, esperando el momento de entrar en acción para beneficiarse de los resultados.

La mejor manera de admirar, de respetar y honrar a los Estados Unidos, es temerles, y no llamarse a engaños sobre ellos. Para ellos somos otro mundo: materias primas, selva elemental, inmigrantes, gobiernos que se sometan y firmen sin demasiadas condiciones los contratos. Y aquí nadie los ama tanto como los que se benefician de esos contratos.

Muchos medios del continente han hecho un gran esfuerzo por convertir a los contradictores de Estados Unidos en los grandes equivocados. Lo han intentado con Cuba y más recientemente con Venezuela, hasta el punto de que sus elecciones victoriosas son elecciones siempre sospechosas. No importa que en Colombia compren votos o arreen electorados bajo promesas o amenazas: esta democracia nunca está bajo sospecha. No importa que los paramilitares produzcan en diez años doscientos mil muertos en masacres bajo todas las formas de atrocidad: la democracia colombiana sigue siendo ejemplar, porque los poderes de la plutocracia siguen al mando. Pero si alguien es enemigo, no de los Estados Unidos sino de los abusos del imperialismo, eso lo hace reo de indignidad.

Uno de esos grandes enemigos del imperialismo es Hugo Chávez. Por ello, aunque nadie pueda atribuirle crímenes como los que manchan las manos de tantos poderes en el mundo, para muchos opinadores y medios es un dictador y un tirano. Yo creo que ha sido un gran hombre, que ha amado a su pueblo, y que ha intentado abrir camino a un poco de justicia en un continente escandalosamente injusto. Para ello ha sido duro con los dueños tradicionales del país y eso no se lo perdonan. Ya se lo perdonarán: cuando adviertan que todo lo que se haga a favor de los pueblos siempre postergados, tarde o temprano fructifica en sociedades más reconciliadas consigo mismas.

Un amigo me decía hace poco que un hombre que se hace reelegir tres veces es enemigo de la libertad. No comparto esa idea restringida de la democracia. La reina Isabel de Inglaterra, que no fue elegida por nadie, lleva sesenta años, es decir, para nosotros, toda la historia universal, como soberana de su tierra, y no veo a nadie protestando contra ese abuso. En Colombia llevamos doscientos años reeligiendo al mismo tipo con caras distintas pero con exactamente la misma política. El único un poco distinto era Álvaro Uribe, sólo porque era un poco peor. Pero el problema no son los hombres sino las ideas que gobiernan, y a Colombia la gobiernan las mismas ideas desde las lunas del siglo XIX, y la consecuencia catastrófica se ve por todas partes.

Si fuera necesario convocar a nuevas elecciones, lo más probable es que las mayorías chavistas sean más grandes aún que en las elecciones pasadas, que ya se celebraron sin su presencia.

Y tal vez nos será dado asistir al paso de Chávez de la historia a la mitología, a la novelesca mitología latinoamericana, de la que forman parte por igual María Lionza y José Gregorio Hernández, Rubén Darío y José Martí, Carlos Gardel y Eva Perón, Martín Fierro y Jorge Eliécer Gaitán, Simón Bolívar y Túpac Amaru, Frida Kahlo y Pablo Neruda, Eloy Alfaro y Salvador Allende, el Che Guevara y Emiliano Zapata, Vargas Vila y Jorge Luis Borges, Benito Juárez y Morazán, Pedro Páramo y Aureliano Buendía.

Una mitología de la que hoy tal vez sólo tenemos vivos a Fidel Castro y a Gabriel García Márquez.

viernes, enero 11, 2013

El Ambiente en la Revolución Bolivariana. Pensamiento e Ideas del Presidente Hugo Chávez sobre el Ambiente.



Presentamos en esta entrada la dirección electrónica para revisar en línea y descargar el archivo (en formato PDF) del interesante libro: "El Ambiente en la Revolución Bolivariana. Pensamiento e Ideas del Presidente Hugo Chávez sobre el Ambiente" asumido por el Ministerio del Poder Popular para el Ambiente. 

Este esfuerzo editorial de gran valía compila pensamientos, ideas del presidente de la República Bolivariana de Venezuela Hugo Chávez, en sus diversas alocuciones públicas, sobre el complejo y vital tema del ambiente, la relación del hombre-civilización con la naturaleza y el rol de la revolución en la preservación de la vida desde la vida. Destaca el  valor bibliográfico de este libro toda vez que cada una las ideas y pensamientos cuenta con los datos espaciales y temporales esenciales para entender en justa dimensión el contexto. 

Difícil ha sido el tránsito que, en la búsqueda de una sociedad que otorgue la mayor suma de felicidad, hemos transitado como colectivo nacional y como continente emancipado. Es en este libro, con prólogo del ex - Ministro del Ambiente, el Ing. Alejandro Hitchter, donde se evidencia la búsqueda de una distinta manera de relacionarnos con el cosmos natural que nos incluye sin cosificación, sin la desmedida agresión a la bio y sociodiversidad que define al capitalismo extractivista neoliberal de estos tiempos.

Preguntas como:¿En esta transición al socialismo se heredan aún (por flojera creativa o por mediocridad notable) discursos y praxis (más peligrosas estas últimas)del capitalismo

Esta interrogante nos orbita toda vez que hemos topado en Venezuela y en los países que integran el ALBA-TCP con visiones y accionares que, en vez de activar la solvencia paulatina de problemáticas complejas socioambientales las mismas se agudizan con el avance de visiones cortoplacistas ancladas en ideales caducos del progreso y el crecimiento económico más tecnócrata.

Entonces para atizar y sumarnos al debate y para entender lo complejo de este vital tema que nos signa y nos convoca de seguido, ofrendamos este enlace electrónico para bajar el archivo, imprimirlo, leerlo y divulgarlo sin demora para iniciar con argumentos, sin desmayo y con eficacia revolucionaria el inédito y fundamental quinto objetivo histórico del segundo plan socialista para la nación 2013 - 2019.

Aquí, sin más dilación y con la gana de ofrendar un material valioso, sírvanse de hacer la descarga electrónica del archivo en la siguiente dirección electrónica:
Sigamos movilizados y en fraterno debate y accionar.