martes, agosto 13, 2013

El conflicto Yukpa de Cuesta el Padre 2013


Por: Nelson Muñoz

El domingo visitamos en el hospital General del Sur de Maracaibo a la familia González Fernández de la comunidad Río Yaza, para conocer el estado de salud de Turuktuko, José Antonio González Vargas, el hijo de Mística Vargas de la comunidad vecina de Kasmera tierra de los Yukpa Parirí. Al llegar estaban en el cuarto un grupo de enfermeras limpiándole la herida y nos quedamos en el pasillo conversando con Mary Fernández Fernández, su esposa, después de los saludos acordamos qué diligencias debíamos realizar para lograr que el martes 13 de agosto a las 7:00 a.m., se presenten en el hospital seis personas dispuestas a donar sangre, precisamos los detalles y luego de terminar las enfermeras de cubrirle la herida entramos a conversar con él, pero debido a las evidentes dificultades para hablar y el reposo que debe mantener, sólo alcanzamos a cruzar una pocas palabras, nos informó que era muy dolorosa la herida, se comunica por señas para evitar molestias. Al salir del cuarto nos encontramos en el pasillo con el médico tratante de guardia y nos explicó que presenta un cuadro delicado porque están comprometidos el riñón, el páncreas y el duodeno, recalcó la importancia de respetar el tiempo de recuperación y se retiró. 

Salimos de nuevo al pasillo para conversar y escuchar el testimonio calmo y doloroso de Mary y su hermana Ana María Fernández. Nos narraron cómo se originó el conflicto en el cual su compañero resultó flechado por un Yukpa del grupo de habitantes de la comunidad del Tukuko encabezado por el Cacique Mayor Inopa y Ezequiel Anane. 

Testimonio de los hechos:

De manera secuencial nos fue contando lo que vivió el lunes 5 de agosto cuando regresaba de Machiques luego de sacarle la cédula a sus dos hijas, según lo contado por Mary Fernández, se trasladaban en dos motocicletas: una conducida por Turuktuka con las dos  adolescentes como acompañantes y en la otra se trasladaba Mary con un joven de su comunidad que le hacía “la carrera”. Antes de llegar al cruce conocido como Cuesta del Padre, límite de las cuencas Tukuko y Yaza, observan un grupo de personas con escopetas, pistolas, cuchillos, machetes y arcos con flechas. En el recorrido Mary y el vecino pasan primero frente al grupo y siguen hacia el Yaza, sin embargo al voltear Mary nota que han detenido a su esposo y ella decide detenerse también, lo que produjo que un grupo armado de hombres y mujeres se dirigieran hacia donde ellos estaban. Al llegar uno de los hombres la toma por el cabello e inmediatamente la lanza al piso para comenzar a darles patadas gritándole que ella era hermana del culpable del homicidio y que sus familiares son asesinos y violadores, la misma suerte corrió el vecino de la comunidad con el agravante que lo querían matar por pensar que era hijo de Mary, a lo que ella entre golpes trataba de decirles que él era un joven de su comunidad y que ninguna relación familiar tenían.

Las dos adolescentes sufrieron las mismas agresiones que su madre y el conductor de la moto: las lanzaron al piso y un grupo de hombres las golpeó. Entre las solicitudes que le hacían a Turuktuka en medio de esta situación era que fuese a su comunidad a buscar a todos sus cuñados, es decir, a los hermanos de su esposa, hijos de Carmen Fernández Romero y a todos los hijos de Sabino Romero Izarra y se los entregara o lo matarían a él. Turuktuka les responde que iban a tener que matarlo porque lo que le pedían era imposible, que él no lo haría. Durante esta discusión el Cacique Mayor del Centro Piloto Tukuko, Inopa, le ordena a dos hombres que agarraran a Mary y la llevaran al Tukuko, a lo que respondió con firmeza Reina Ubiriche, quien antecedió a Inopa como cacique mayor, pues ella no podía permitir que se la llevaran esos dos hombres porque la iban a matar y se ofreció para mediar en la situación, el cacique mayor le dijo a los hombres designados que la dejaran ir con Reina y que solo uno se fuera. 

Se trasladaron en la moto los tres y al llegar a la comunidad algunos habitantes le gritaban insultos a ella y a su familia. Ya encerrada en una habitación Mary cuenta que tuvo una conversación con Reina Ubiriche muy sincera, le comunicó que la manera como habían reaccionado en el Tukuko era más violenta que lo que ellos tanto han dicho de las familias de Carmen Fernández y Sabino Romero, entre las palabras utilizadas por Mary para narrar esa conversación están las frases: “Sabino nunca flechó a un indígena, nunca mató a un indígena, ustedes ahora lo están haciendo y dicen que él era el violento y nosotros también”… continuaba diciendo: “ustedes son maestros y se comportan así, ustedes andan con los curas y se comportan así, nosotros no queremos más problemas con ustedes, la gente dice que el muerto pasó toda la noche diciéndole a mi hermano que era un asesino y un violador, la tía también, estaban borrachos, se fueron para otro negocio para evitar un conflicto y allá llegaron a seguir molestando, le sacó una pistola y le dijo que por su culpa su tío Manguera estaba preso”. Mary continuó explicándole a Reina lo que había pasado, pero cuando nombró a Manguera le recordó un pasaje de este personaje hoy preso acusado de ser el sicario que asesinó al Cacique Sabino Romero Izarra, le dijo: “ese señor hace cinco años más o menos mató a mi primo, él le faltó el respeto a una señora y como mi primo le dijo algo comenzaron a discutir y sin más sacó un revólver y le pegó tres tiros, después dijo que lo había matado sin culpa, y nosotros no nos vengamos”. Una conversación similar nos contó Mary que tuvo con una señora pareja del sicario Manguera, aprovechó para recordarle que cada vez que hay un muerto en la cuenca del Yaza a ese señor se le ve los días antes por la zona y después desaparece por varios meses.
Al rato de estar encerrada llegaron las hijas maltratadas al mismo cuarto y le información que Rafael Chourio le había clavado una flecha en la espalda baja a Turuktuka, Mary al escuchar esa noticia le dice a un joven de la comunidad que le fuese a decir al Cacique Mayor Alfonso Inopa que por favor la dejara salir porque ella debía ir a cuidar de su esposo que estaba herido. Cuenta Mary que esta autoridad le responde a través del joven mensajero que esa detención era responsabilidad de Reina Ubiriche y que él no se encargaría de esa situación. Ante esa respuesta le envía un mensaje a Reina pidiéndole que vaya a verla, al llegar Reina le explica lo dicho por el Cacique Mayor y Reina extrañada le comenta que eso es responsabilidad de la máxima autoridad de la comunidad pero que si él había dicho eso pues ella no iba a cargar con la muerte de su esposo y que podía retirarse en ese momento, sin embargo, la retuvo porque consideró que si salía al pueblo la mataría y le pidió al viceministro Barí a Eladio Akadaya y a Mendiola que la escoltaran hasta sacarla del pueblo, se montaron los dos con Mary y las adolescentes en un vehículo para trasladarse al hospital de Machiques y el grupo liderado por Inopa y Anane no les permitieron el libre paso para no dejarla salir y lincharla. Ante esa situación, el Viceministro trató de intervenir para mediar la situación pero Mary Fernández se bajó del carro y les dijo que si la iban a matar que lo hicieran porque ella no seguiría escondida porque no había hecho nada y es inocente de todo, les decía que entendía mejor a su hermano si realmente cometió el delito del que se le acusa porque seguro estaría al borde de los insultos e infamias que le decían, les trataba de explicar que ellos no podían señalar y agredir a toda una familia por algo que haya cometido un integrante. Ante lo expresado por Mary, Ezequiel Anane cambió la actitud violenta y le comunicó al grupo que la dejaran ir tranquila, de esa manera Mary pudo salir del Tukuko y trasladarse al Hospital de Machiques y luego al de Maracaibo donde nos contó este testimonio. 

Luego de escucharla surgieron algunos aspectos que nos permiten visualizar el alcance de la estrategia ganadera y de sectores del Estado-Gobierno serviles a esta clase, veamos de qué se trata:

Análisis:

1)     Llama poderosamente la atención que el Centro Piloto Tukuko representados y agitados por su Cacique Mayor Alfonso Inopa, por lo maestros formados por los curas y el cura Nelson Sandoval tengan el mismo discurso que el sector ganadero, acusando y criminalizando la familia de Carmen Fernández Romero y Sabino Romero Izarra de asesinos y violadores. Recordemos que este líder agitador del odio entre el pueblo Yukpa recibió en una de sus gestiones la imposición de banda que lo representa como Cacique Mayor de manos del Presidente de GADEMA y también propició el conflicto violento el día de las elecciones donde se dieron las condiciones idóneas para asesinar a Sabino Romero Izarra.

2)     Es una vieja estrategia de los ganaderos infiltrar a las organizaciones Yukpa y a los líderes para generar conflicto entre familias indígenas y no-indígenas. Solo tenemos que recordar las causas que generaron el conflicto entre Olegario y Sabino que los llevó a la cárcel y a un juicio amañado que duró 19 meses, para tratar de fragmentar la resistencia y quebrar las relaciones políticas de los líderes Yukpa en pleno proceso de demarcación del hábitat y tierras del pueblo Yukpa.

3)     El discurso de criminalización a través de asesinatos, violaciones y secuestros inventados ha sido minuciosamente construido y montado por los medios de comunicación racistas, autoridades religiosas y los funcionarios policiales y judiciales al servicio de los intereses ganaderos.

A modo de reflexión:

La posibilidad de lograr la resolución pacífica de este conflicto se eleva en la medida que se asuma la situación como un proceso complejo donde deben considerarse una serie de aspectos para el diseño de las estrategias. Entre ellos:

1)     Alinear las políticas aplicadas por el Estado-Gobierno con lo que reza la constitución de la República en su artículo 260, así como la jurisdicción nacional e internacional que respeta y promueve la resolución de conflictos desde las formas para administrar justicia de los pueblos originarios.

2)     Revisar por parte de las autoridades del Estado y en el marco de la Misión a Toda Vida Venezuela, el Plan Patria Segura y el Movimiento por la Paz y la Vida la función que están desarrollando los actores religiosos como mediadores para la paz en este conflicto Yukpa.

3)     Destacar la valiosa ayuda que para la resolución pacífica de los conflictos en este caso pueda significar la participación activa de la señora Reina Ubiriche. Es necesario recordar que fue ella quien contando con todo el respeto y respaldo de las comunidades que representaba para ese momento le solicitó a la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia que dejara en libertad a Sabino, Alexander y Olegario y le entregara ese caso a la justicia Yukpa. Luego de salir de la cárcel de Trujillo inició el proceso de justicia propia y en una reunión que duró 12 horas aproximadamente con las autoridades necesarias del pueblo Yukpa se logró determinar las responsabilidades individuales que la justicia ordinaria en un caso viciado durante diecinueve meses no pudo develar.