duele toda la vida resistir. duele aún este octubre de efeméride luctuosa.

diseño: shakty sánchez.

no trato acá de enhebrar palabra que diga lo padecido, lo tantas veces padecido.

no ha sido mi dermis ni la mirada que me sostiene la que ha contenido todo el peso del dolor ofrendado por otros que se asumen mejores.

no se trata este momento, palabra y latido, de hacer cronología de oprobios para cumplir con la efeméride impuesta.

no se trata de untarnos de llanto y quiebre. de lo que se trata es de saber que en nosotros habitan mundos, ideas y colores que no estafan, que no manipulan, que no trafican con lo vivo en la vida.

quise entender, puntualmente qué es eso de la resistencia para así poblar mi imaginario y mi accionar de certezas, de lagunas claras y brebar allí de seguido. encontré este fraseo en el libro de las definiciones:

Resistencia: f. Acción de resistir o resistirse. Capacidad que tiene un organismo para luchar contras las enfermedades o soportar dolor, hambre, cansancio, etc. Oposición a un ataque. Mec. Causa que se opone a la acción de una fuerza. Acto de negarse a obedecer un mandato.

brotado de asombro oigo y miro al indígena hombre y mujer en permanente lucha. ¿será que así me veo y oigo? entiendo así al indígena en su espacio y tiempo. me acerco a su justicia y razón digna de ser: resistirse a nuestra idea - progreso y a nuestra acción - progreso.

sé que los indígenas resisten en nuestra patria desde su silencio y ardor, desde su mirada lágrima.

con profundidad sabia develan que nuestro agite y tensión, nuestro pánico a lo simple, nuestra grieta con el cosmos, nuestra seriedad enfermiza de "criollos" violenta sus energías, declara desintegraciones en su vida y anuncia oquedades para todos.

así en resistencia eterna las fuerzas humanas se pueblan de desconfianza y el mandato de lo ajeno termina rasgando las fibras de todo imaginario, de todo anhelo.

en este tiempo confuso de esperanza limitada y amenaza inmensa la vida celebra sudorosa los esfuerzos por permanecer y ser vivos desde la vida y por la vida.

reforzar en abrazo el latido indígena para desencajar a este sistema asfixiante que aún impera, que lucra con lo vivo, que tergiversa la memoria, que pisotea toda idea toda acción - mujer del cosmos.

por ello germinar al lado y no enfrentados a los indígenas se asume como desafío vital.

ese nosotros diverso en piel y palabra indígena está urgido de nuestra fuerza hermanada para poder ser, seamos con ellos, desde ellos: seamos juntos.

no trato acá de enhebrar palabra que diga lo padecido, lo tantas veces padecido.

no ha sido mi dermis ni la mirada que me sostiene la que ha contenido todo el peso del dolor ofrendado por otros que se asumen mejores.

no se trata este momento, palabra y latido, de hacer cronología de oprobios para cumplir con la efeméride impuesta.

latido de esta tarde quiso en mí que juntara estas palabras para no decir lo que todos los octubres en nuestramérica solemos decir.

entiendo que mi decir sobre este nosotros desafiante inicia sus taquicardias este 11 de octubre de 2010, un día semejante como al de ya hace 518 años antes, entendido como el último día de los decires y haceres propios de los indígenas en su mundo.

un día después a aquel 11 de octubre de 1492, hace 518 años, la sangre y el horror de esos tiempos mantienen su eco hasta estos soles y lunas que nos hacen.

decir esperanzado, en exhorto:

el miércoles 13 de octubre vamos hasta el estado trujillo a mantener nuestro abrazo solidario con los indígenas yukpas detenidos hace ya un año. en caracas, capital venezolana, ese mismo día, habrá un fuerte plantón frente a las instalaciones del ministerio del poder popular de interior y justicia.

la soledad o se puebla de sudores y afectos
o se la come el polvo y el peso de la distancia.

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