El Consejo Universitario de LUZ se da la mano con el fascismo y el racismo
.antropólogo lusbi portillo.
sabemos de la perijá sociodiversa por sus 25 años de lucha incesante y consecuente.
foto:.cano.
sabemos de la perijá sociodiversa por sus 25 años de lucha incesante y consecuente.
foto:.cano.
Por: Sociedad Homo et Natura
El Consejo Universitario de La Universidad del Zulia publica el Acuerdo nº 615 favoreciendo la posición de los ganaderos frente al conflicto por el derecho a la tierra de los pueblos indígenas y, advirtiendo que el Profesor Lusbi Portillo compañero de la Sociedad Homo et Natura y fundador de la Plataforma por los Derechos de los Pueblos, no habla en nombre de esta casa de estudios, aclarando con apurado énfasis que ellos son lo únicos autorizados para aprobar una posición en nombre de la institución.
Es un hecho público y notorio que nuestro compañero, el antropólogo Lusbi Portillo, jamás ha hablado en nombre de LUZ, donde dirige las Cátedras de Ética Ecológica y de Lógica, sino en nombre de nuestra organización no gubernamental Sociedad Homo et Natura, consagrada a la defensa de la biodiversidad, el agua y el bioentorno de la Cuenca Occidental del Lago de Maracaibo y a la Defensa de los Derechos Ancestrales de los Pueblos Indígenas a su territorio.
La Universidad no tiene derecho interno ni externo a desautorizar su palabra y su acción ya que esta no le pertenece en absoluto, mas aún la autonomía de cátedra como principio universitario consagra y protege su palabra y es deber de La Universidad protegerla aún en divergencia.
También es un hecho notorio que muchas autoridades rectorales, decanos, profesores y estudiantes en diversos momentos en los últimos 30 años se han mostrado solidarios y militantes de la causa de defensa de la Sierra de Perijá y aún es así, sin importar la diversidad ideológica y de enfoques característica de la Universidad venezolana.
Lamentamos que el Consejo Universitario este identificado como nunca con las posiciones más conservadoras y retrogradas de la clase ganadera zuliana y la ultraderecha, tan identificados con los mas esclerozados residuos de la ideología adeca. Recordemos que hubo adecos mejores en LUZ.
Las nubes grises del actual momento no pueden ocultar el sol de la lucha social, sino que además, no pueden ocultar la modorra y el aburrimiento mental con el que transcurre la vida académica actual en esta que ha sido la casa de todos. Qué lejos estamos de aquella época en que la universidad cuidaba a sus hijos e hijas, su libertad de pensar, de hacer y de decir ante las contradicciones del saber y la realidad social.
Este mediocre pronunciamiento donde solo destacan el miedo, el respaldo a las posiciones adeco-latifundistas del gobierno regional y un solapado silencio a favor de las trasnacionales mineras, deja en claro que a las actuales autoridades univeristarias no les importará lo que le pase a uno de sus académicos, expuesto como anda a todos los poderes por ser consecuente con la libertad del saber y de la conciencia, sin haber comprometido en ningún momento a la institución universitaria.
Solo han evidenciado la orientación corporativa, de clase, de la actual gestión universitaria, manchando a demás la trayectoria libertaria de la universidad zuliana. Es evidente que no eran sinceras sus recientes consignas opositoras por la libertad de cátedra y sólo levantan la voz para defender esa madriguera de lo viejo en que han convertido el recinto universitario.
Nosotros en la Sociedad Homo et Natura, egresados muchos de LUZ, andamos desprevenidos del egoísmo de su aburrida burocracia interna, caminando alegres por el camino de los saberes verdaderos, mas antiguos que los oficios administrativos de esa caja de olvidos en que ha devenido el claustro universitario, estamos, en el camino de las comunidades.
Es un hecho público y notorio que nuestro compañero, el antropólogo Lusbi Portillo, jamás ha hablado en nombre de LUZ, donde dirige las Cátedras de Ética Ecológica y de Lógica, sino en nombre de nuestra organización no gubernamental Sociedad Homo et Natura, consagrada a la defensa de la biodiversidad, el agua y el bioentorno de la Cuenca Occidental del Lago de Maracaibo y a la Defensa de los Derechos Ancestrales de los Pueblos Indígenas a su territorio.
La Universidad no tiene derecho interno ni externo a desautorizar su palabra y su acción ya que esta no le pertenece en absoluto, mas aún la autonomía de cátedra como principio universitario consagra y protege su palabra y es deber de La Universidad protegerla aún en divergencia.
También es un hecho notorio que muchas autoridades rectorales, decanos, profesores y estudiantes en diversos momentos en los últimos 30 años se han mostrado solidarios y militantes de la causa de defensa de la Sierra de Perijá y aún es así, sin importar la diversidad ideológica y de enfoques característica de la Universidad venezolana.
Lamentamos que el Consejo Universitario este identificado como nunca con las posiciones más conservadoras y retrogradas de la clase ganadera zuliana y la ultraderecha, tan identificados con los mas esclerozados residuos de la ideología adeca. Recordemos que hubo adecos mejores en LUZ.
Las nubes grises del actual momento no pueden ocultar el sol de la lucha social, sino que además, no pueden ocultar la modorra y el aburrimiento mental con el que transcurre la vida académica actual en esta que ha sido la casa de todos. Qué lejos estamos de aquella época en que la universidad cuidaba a sus hijos e hijas, su libertad de pensar, de hacer y de decir ante las contradicciones del saber y la realidad social.
Este mediocre pronunciamiento donde solo destacan el miedo, el respaldo a las posiciones adeco-latifundistas del gobierno regional y un solapado silencio a favor de las trasnacionales mineras, deja en claro que a las actuales autoridades univeristarias no les importará lo que le pase a uno de sus académicos, expuesto como anda a todos los poderes por ser consecuente con la libertad del saber y de la conciencia, sin haber comprometido en ningún momento a la institución universitaria.
Solo han evidenciado la orientación corporativa, de clase, de la actual gestión universitaria, manchando a demás la trayectoria libertaria de la universidad zuliana. Es evidente que no eran sinceras sus recientes consignas opositoras por la libertad de cátedra y sólo levantan la voz para defender esa madriguera de lo viejo en que han convertido el recinto universitario.
Nosotros en la Sociedad Homo et Natura, egresados muchos de LUZ, andamos desprevenidos del egoísmo de su aburrida burocracia interna, caminando alegres por el camino de los saberes verdaderos, mas antiguos que los oficios administrativos de esa caja de olvidos en que ha devenido el claustro universitario, estamos, en el camino de las comunidades.
Tierra indígena, sin minas y sin hacendados
¡Perijá tiene Derecho a la Vida!
¡Luchar hasta vencer!
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