Apuntes para una ciudad puerto que ansía ser otra.
.maracaibo.
I.
Una ciudad
más que un quiste demográfico o una aglomeración de incesantes destinos que
friccionan en su oficio de existencia, debe
ser la espacialidad donde los ejercicios de la libertad al aire libre tengan
cabida gozosa y fluyan sin obstáculos ni limitaciones derivadas
de la cultura prohibitiva que a todo quiere censurar en procura de
autosatisfacciones malevas.
II.
Una ciudad
más allá de la espacialidad político
administrativa es un locus que da cobijo
a diversos imaginarios, a diversas cosmovisiones y es por ello que en esta
etapa civilizatoria que tejemos en juntez colectiva todas y todos debemos
seguir insistiendo en idear y llevar a la
concreción las propuestas, los proyectos que sumen vida digna y que
ayuden a “desescamarnos” de la ciudad guarida de imaginarios alienados, de
soberbias y visiones humanas sustentadas en los antivalores del suicida modo
capitalista de concebir la ciudad y sus habitantes.
III.
Si una
ciudad transita en paulatino acercamiento
a la concepción comunalista y asume en organicidad plural la
elevación de los niveles de participación en sus asuntos, sin representantes,
sin intermediarios que disipen los esfuerzos y las historias de resistencia e
insistencia local, debemos atizar de continuo,
debemos mantener vigente en vuelo creador y sensible el abrazo a nuestra
identidad real, sin farsalias, y a nuestro ecosistema, vital y
frágil dimensionalidad, que nos incluye
y nunca nos rodea.
IV.
Maracaibo
es el municipio, y es la capital y es la ciudad puerto surcada de oleajes que
van ubicando en sus riberas historias, tragedias, gozos y luminosidades que
religan un decir y un hacer particular, único en este planeta amenazado de
calenturas y desmanes belicistas imperiales. Maracaibo lago y petróleo que
tizna la barca del pescador, Maracaibo la del lago poetizado en páginas de
bardos pero que aún espera potenciar su ciencia para rescatar integralmente,
sin fragmentaciones positivistas ni jerarquizaciones verticalizadas, al lago y
la fronda de manglar que aún es hábitat de importantes especies de peces y
crustáceos claves para pequeñas economías regionales.
V.
Ciudad esta hecha laberinto donde lucran
estafadores y estados paralelos, donde se ha erigido una ética y
una moral que insiste en desangrar de calamitosas situaciones a un Estado
(regional y nacional) ocupado en brindar vida digna. Recordar la necesaria
vinculación con la ciudad puerto, la ciudad de cara al lago y a la brisa de los
vientos alisios para ser otros y otras y
estar a la altura de la comunalización del proyecto nacional que nos ha dejado
el comandante Hugo Chávez Frías como plataforma para impulsar
nuestra idea de Patria Bolivariana.
VI.
Gestores
ambientales y agroecólogos (de la recientemente creada Universidad Bolivariana
de Venezuela – Sede Zulia) germinan sin destino la más de las veces y engrosan
(cómo jamás se llegó a pensar) el listado de jóvenes que apostaron todo por ser
mejores y luego las carestías y la ausencia de creatividad y voluntad política terminaron
acercándoles a frustraciones y a escenarios “mata – votos”. Es el momento, es
la maravillosa coyuntura la que se presenta para avanzar en un plan que les
estimule y les active en planes para acompañamiento de los consejos comunales
en cuanto a lo relativo a la reforestación urbana, al paisajismo plástico
(muralismo), al embellecimiento que merece la ciudad puerto (más allá de lo
cosmético que ha erigido para sí y para la urbe que desgobierna la actual
ciudadana alcaldesa).
VII.
Ciclcovías
para las travesías por la ciudad, para la contemplación de la ciudad desde
otras perspectivas menos vehicular, menos agresiva y más humana, más sensible son desafíos aún pendientes. Marc Augé nos habla de pedalear en las
urbes como asombro y maravilla. Rescatemos
pues esta necesidad de concebir la ciudad para el peatón, para el masivo
transporte que dignifique, primeramente: a los que desde un carro “por puesto”
ya cumplieron una etapa histórica de la urbe y en segundo lugar, dignifique a
los ciudadanos que ofrendan su tiempo de manera cotidiana a horas que se
despilfarran en colas y en malestar general esperando
una unidad de transporte que le humilla y le apretuja como mercancía enlatada.
VIII.
El
ecoturismo integral como opción de empresa de producción social es alternativa
pensada y ya hecha croquis en numerosos proyectos locales (verbigracia UBV-Sede
Zulia). Es menester abrir las compuertas para que en festivales itinerantes (por cada
una de las parroquias del municipio Maracaibo)
de ecología urbana se potencien estas propuestas a partir de inéditos
ejercicios de participación, debate, asesoramiento y arranque de las mismas. Plazas públicas deben ser los espacios del
buen vivir que den cobijo a estas ideas, a estas exaltaciones tangibles
del pueblo ocupado en sus tareas libertarias.
IX.
Consideramos al ecosocialismo como vía para
erigir el abrazo a la dimensionalidad femenina, a la
dimensionalidad procreadora, reproductora de la naturaleza. Desde esta visión y
praxis para abonar esfuerzos por el mundo posible nuestramericano y latino - caribeño,
entendemos que no debemos deslindarnos del abrazo pleno de la cultura y el
deporte y desde ya queremos hacer hincapié en las propuestas vinculantes con
las comunidades para avanzar (con apoyo decidido de la Alcaldía Bolivariana
de Maracaibo y de la Gobernación
Bolivariana del Estado Zulia)en la conformación y activación definitiva de los
espacios vecinales de cultura y ambiente para fomentar la elevación de los
niveles de conciencia a partir de lúdicas y talleres donde el cuerpo, los
sentidos y el alma toda estén inmersos en la posibilidad de entender y gozar la
revolución en todo su esplendor y en todo su desafío permanente. Cine
militante, juegos ecológicos, arte circense, deporte enfocado a derribar de una
buena vez la cultura de consumo y de agite que ha promovido en todas y todos
malestar y sobrevivencia.
X.
Una ciudad
para ocuparnos en sano ejercicio de la vida toda, donde sea parte del pasado la
tendencia xenófoba de excluir a otras especies vivas con las que convivimos so
pretexto de que somos superiores y debemos hacer primeramente nuestro destino y
ya veremos si les incluimos. Una
ciudad que se atreva por primera vez en el mundo a asumir la mutación necesaria
que lleve, por ejemplo, de contar con una plaza de TOROS a una plaza de TODOS. Una
ciudad donde con la ayuda de veterinarios sensibles, revolucionarios,
comprometidos con la ética bolivariana y chavista, ofrenden sus mejores
esfuerzos en jornadas gratuitas de vacunación y esterilización de mascotas,
atención digna a animales en situación de calle, control y apoyo a autoridades
con competencia ambiental en el tráfico de fauna silvestre en las esquinas de
la ciudad. Una ciudad definitivamente donde sean otros los niveles de relacionamiento
con la vida, donde seamos conscientes de la permanente humildad que sigue
reclamando de todos nosotros el humilde santo de los pesebreros y los
ecologistas: San Francisco de Asís. Aquí el
apoyo del Colectivo Nevado Zulia es fundamental.
XI.
Finalmente,
en este fraseo de anhelos, la más de las veces pospuestos por dinámicas de
sobrevivencia y horror, nos llevan a plantear y a exhortar con firmeza la
necesidad de repensar, rehacer entre todos y todas la ciudad (ojalá ya no más)
anclada a visiones y tendencias bursátiles de oferta, demanda, especulación y
extractivismo. Agua que
llega de Perijá nos lleva a conectarnos con sistemas ecológicos que vienen en
franco deterioro y amenazan con problematizar aún más a esta ciudad repleta de
centros comerciales con sus “ferias de comida” y desorientada y sin una brújula
que indique cómo ha de crecer en el futuro desde sus pobladores. Las
cosmovisiones indígenas, el campesinado, la visión de mundo afrodescendiente
convergen en este suelo y cielo y claman ser respetadas desde sus imaginarios
para estar en igualdad frente a apreciaciones tecnocráticas, xenófobas y
superfluas erigidas desde el occidentalismo eurocéntrico sionista –
capitalista. Si
Maracaibo es más que lugar de edificaciones, más que las carestías en sus
servicios públicos básicos, comencemos por abrazarnos al Lago, a Perijá, a
Bolívar, a la militancia mujer comunal de siempre para que germine en asombros
y en desafíos más allá de proselitismos non santos.
Ciudad Puerto Maracaibo, 2 de noviembre de
2013.
MSc. Nicanor A. Cifuentes Gil
Docente PFG
Gestión Ambiental / UBV-Zulia.
Colectivo La Mancha.
ncifuentesg@gmail.com/@bioluminico/0426
863 14 74
Documento entregado al candidato a alcalde Miguel Pérez Pirela en evento de los colectivos ecologistas activados en el Municipio Maracaibo.
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